Después de una temporada sin poder salir a entrenar o hacer actividad física al exterior, y junto al agradable clima y mayor tiempo disponible, muchas personas, ya anteriormente deportistas, como iniciados recientemente, han optado por practicar deporte este verano. Sin embargo, más allá de la situación actual, históricamente se cree que hay un aumento de lesiones en verano.

Desde Centres Cruz Navarro, os explicamos qué hay de cierto en esta afirmación y por qué puede ocurrir.

¿Se dan más lesiones en verano realmente?

Durante los meses de otoño, invierno y parte de la primavera, nuestro ritmo de vida y el tiempo nos hacen centrarnos en el trabajo y otras obligaciones, y dejar de lado las actividades de ocio, por lo que cuando los días se hacen más largos y es agradable estar en el exterior se produce un aumento del deporte estacional.

En verano gracias a que disponemos de mejor clima y más tiempo, podemos tener también más motivación para salir a ejercitarnos, sobretodo después de tiempo sin podernos dedicarnos a ello.

¿Por qué suelen producirse las lesiones en verano?

La mayoría de las lesiones en verano se producen por una mala práctica de la actividad, ya sea por falta de técnica, como por descuido de algunas consideraciones importantes. Os pasamos a detallar algunas causas comunes:

Falta de calentamiento y estiramientos

En verano la temperatura ambiente es más alta, por lo que a nuestros músculos no les cuesta tanto prepararse para la actividad física como en invierno, en que podemos sufrir vasoconstricción para conservar mejor el calor corporal, así como rigidez.  Sin embargo, a pesar de esto, el calentamiento antes del entrenamiento es esencial para activar el metabolismo y facilitar el riego sanguíneo.

Por otra parte, tras el entrenamiento, es muy importante no olvidarnos de los estiramientos, ya que estos nos ayudarán a que nuestro sistema musculoesquelético vuelva a la normalidad sin problemas.

Sobreesfuerzos o entrenamiento no progresivo

Se dice que “hace más el que quiere que el que puede” y la mayoría de veces esto es cierto, sin embargo, querer únicamente, sin hacer las cosas adecuadamente, no solo no nos hará avanzar, sino incluso retroceder. Como en todo, en la actividad física se debe avanzar paso a paso pero de forma segura. Si un día nos esforzamos mucho, sin que nuestro cuerpo esté acostumbrado, si queremos empezar por la cima en vez de por la base, no solo no podremos seguir el ritmo, sino que podremos sufrir lesiones.

Material deficiente o inadecuado

Tanto para el running como para deportes como el fútbol, el baloncesto, el tenis, y largo etc. en algunas ocasiones es necesario contar con material adecuado para la práctica física. Por ejemplo, en el running es fundamental contar con calzado cómodo pero que nos permitan una buena pisada y que también sujete el pie.

Superficies duras o irregulares

En el running, por ejemplo, correr por superficies como el asfalto, que es muy duro y produce mucho impacto, pueden producirse lesiones articulares o musculares, debido a ello. En otros casos, como los terrenos forestales o la arena de la playa, el suelo irregular también puede producirnos lesiones.

Falta de precaución o no utilizar material de protección

Si se practican deportes de riesgo sin el debido material de protección, o se realizan actividades en lugares en los que no estamos acostumbrados o no tenemos mucha información o seguridad acerca del espacio (por ejemplo, lanzarnos al agua sin saber la profundidad del agua) podemos sufrir lesiones muy graves.

Las lesiones más comunes en verano y cómo actuar

Teniendo en cuenta esto, las lesiones más frecuentes en verano son las tendinitis, las fracturas óseas, el dolor del manguito rotador, los esguinces, la fascitis plantar y las lesiones cervicales.

Para tener una buena salud musculoesquelética, por lo tanto, deberemos tener en cuenta estas consideraciones, así como descansar, hidratarnos y alimentarnos correctamente, así como consultar con un profesional de la fisioterapia.

Si precisáis de mayor información, no dudéis en poneros en contacto con nosotros sin compromiso.